Más que molestarle, a la directiva del Toluca le generó gran preocupación que un grupo de barristas acudiera ayer al entrenamiento del equipo para pedir de una forma no tan amistosa a los jugadores que mejoren su desempeño cuanto antes.
Los Diablos Rojos saben que han quedado mucho a deber en el actual campeonato, pero les inquieta que los futbolistas puedan ser víctimas de alguna agresión, por lo que ya contemplan la posibilidad de que tengan seguridad especial para evitar incidentes.
Más historias
Toluca: baja afluencia en gimnasios
El millonario finiquito que Nacho Ambriz le exige al Toluca
Tiago Volpi acepta que Toluca vivirá un arranque «difícil» durante el Clausura 2024